La piña es una fruta de un delicioso sabor dulce, que además de ser refrescante, tiene importantes propiedades y beneficios que vale la pena aprovechar, en especial cuando es temporada de consumirla.
Propiedades y beneficios
Además de ser una fruta diurética y desintoxicante, la anana mejor conocida como piña, contiene vitaminas C, B1, B6, ácido fólico y minerales como el sodio, potasio, calcio, magnesio, manganeso y hierro. Gran parte de la composición de la piña es agua y también tiene una cantidad importante de fibra.
Comer piña después de las comidas ayuda a una mejor digestión gracias a su contenido en ácido cítrico y málico, así como a una enzima vegetal, la bromelina, estos componentes favorecen los procesos digestivos, en especial de los alimentos ricos en proteínas. La bromelina, también ayuda a disminuir la inflamación en el organismo, por ejemplo, después de una cirugía.
Al ser rica en vitaminas y minerales y baja en calorías, es ideal para las personas que quieren perder peso.
Contiene hasta un 85% de agua, que te ayudará a hidratarte y sentirte satisfecho. Consúmela en agua, combinada con otros ingredientes para hacer un nutritivo jugo o sola en rodajas.
Comer piña te da la energía necesaria para enfrentar diversas actividades o el ejercicio cotidiano gracias a que contiene yodo, zinc, sodio e hidratos de carbono.
Te ayuda a disminuir la presión arterial, por su contenido en sodio y potasio.
Previene el molesto estreñimiento ya que contiene fibra que da volumen a las deposiciones.
Es rica en manganeso un mineral que puede ayudarte a mejorar los síntomas de varias enfermedades como la osteoporosis, la artritis, el síndrome premenstrual, la diabetes e incluso la epilepsia.
Te protege de problemas circulatorios y cardiovasculares. Gracias a la bromelina, reduce la posibilidad de que presentes una tromboflebitis o angina de pecho.