Es de esperar que sea tan nuevo en el deporte que todavía no haya sufrido lesiones graves. Quizás la mejor manera de evitar cualquiera de las siguientes lesiones comunes en su futuro de triatlón sea sencillamente tener constancia de ellas. Pero en caso de que ya le haya afectado alguna, consejos de recuperación, así como ajustes de entrenamiento.
1. TENDINITIS DE LOS MUSCULOS DEL HOMBRO
“Hombro del nadador” es una expresión general usada a menudo para describir muchos tipos de problemas en el hombro, tales como distensiones, tirones y tendinitis, la tendinitis de los músculos del hombro esta causada frecuentemente por ejercicios en la piscina, que son demasiados en número o demasiado duros, un desequilibrio en esos músculos, o una técnica de brazada deficiente. Se produce una inflamación debida a desgarros musculares microscópicos y a tensión en los cuatro músculos principales que actúan conjuntamente, conocidos como largo mayor, largo menor, deltoides e infraespinoso. El dolor suele ser localizado (limitado a esa zona), aunque puede difundirse hacia abajo por el brazo. La rigidez y la dificultad para levantar el brazo en un ángulo de 90º, la debilidad al elevarlo y el dolor por la noche son indicios de este tipo de tendinitis.
RECUPERACIÓN
En los casos leves ayudara a reducir el dolor el descanso, hielo y compresión del hombro con una venda venda elástica. En los casos graves, un cirujano ortopédico puede recomendar una intervención quirúrgica artroscópica.
2. DISFUNCIÓN DE LA ARTICULACIÓN SACROILIACA
La articulación sacroiliaca es aquella que conecta la espalda y la cadera. A diferencia de otra articulaciones rodeadas por un músculos, esta se apoya predominantemente en los ligamentos. Cuando estos ligamentos se irritan. Tanto por un desequilibrio estructural como muscular, se produce esta lesión deportiva conocida frecuentemente como disfunción de la articulación sacroiliaca. El dolor se localiza normalmente en la zona lumbar de la espalda baja, justo encima de la cadera, y es un dolor sordo, pero puede volverse agudo si prosigue el entrenamiento. A veces el dolor puede irradiarse a otras zonas de la cadera y de la espalda. La articulación sacroiliaca no es la única involucrada, existe también debilidad muscular o problemas estructurales; algunas veces ambos.
CONSEJOS DE RECUPERACIÓN
Localice y corrija cualquier desequilibrio estructural en sus movimientos ciclistas o de carrera a pie (tales como los causados por diferencia en la longitud de las piernas), Un médico especializado en medicina deportiva debe poder ayudarle a localizar los desequilibrios, y le recomendará maneras de corregirlos o de limitar su impacto. Controle su posición sobre el manillar de la bicicleta: ¿es incómoda y le causa dolor de espalda? Si es así, será mejor sacrificar un poco de aerodinámico en pro de una mayor comodidad y salud.
3. DESGARRO DE LOS MÚSCULOS DEL MUSLO
El desgarro de los músculos del muslo, entre ellos los aductores, puede producirse súbitamente al correr sobre bicicleta, particularmente durante una sesión intensa, tal como un entrenamiento por intervalos o un sprint ante la línea de meta. La bajada en pendiente es otra posible causa. Esta lesión suele estar causada por una tirantez, debida frecuentemente a sobrecargas o a desequilibrios musculares. Se produce frecuentemente en los tendones cerca de la rodilla o la cadera, aunque tampoco es extraño un desgarro en la porción central. El dolor suele ser agudo y se localiza en una zona muy específica.
AJUSTES EN EL ENTRENAMIENTO
Dependiendo de la gravedad del desgarro, su médico deportivo puede autorizar una carrera ligera 48 horas después de la lesión. Si continúa corriendo, debe hacerlo suavemente sin castigar la zona afectada, con zancadas cortas y evitando bajadas o tramos con inclinaciones laterales. Correr suavemente es un excelente ejercicio alternativo para reducir la tensión en la zona.
4. SÍNDROME DE LA CINTILLA ILIOTIBIAL
La cintilla iliotibial está localizada en el lado externo del muslo, desde la cadera hasta la rodilla. Afectando tanto a los corredores a pie como a los ciclistas, el síndrome de la cintilla iliotibial es una inflamación causada por los tendones de la misma que rozan contra el hueso exterior de la rodilla. El dolor se localiza generalmente en la parte externa de la rodilla, pero la irritación puede producirse en cualquier parte entre la rodilla y los glúteos. Aunque el dolor no es incapacitante, a menos que se corrija, esta lesión puede arruinar persistentemente su entrenamiento.
AJUSTES EN EL ENTRENAMIENTO
Pruebe a correr suavemente o pedalear ligeramente sobre bicicleta. Evite ejercicios de alta intensidad hasta que se haya curado la lesión. Esto incluye pendientes o cualquier tipo de terreno abrupto que pudiera causar una recaída en la lesión.