Sentarte a comer y disfrutar tus alimentos debe ser una actividad placentera y libre de distractores como el televisor, ir manejando o estar checando tu celular. Te diremos por qué es importante que no te distraigas al comer.
– Comes más. Así es, cuando estás viendo la televisión o realizando alguna actividad ajena a comer, no te das cuenta de las cantidades que ingieres y está demostrado que comes más.
– Subes de peso. Si vas desayunando en tu auto o, por las cargas de trabajo, comes sentado en tu lugar, no tomas conciencia de la calidad de tus alimentos pues te llevas lo que sea a la boca. Además, realizas menos actividad física que te puede llevar a subir de peso.
– No disfrutas. Estar abstraído en el televisor o el celular no te permite hacer del momento de la comida una ocasión agradable y disfrutable, al contrario, te aíslas, no saboreas los bocados, ni le das importancia al sentido del gusto.
– Afecta tu digestión. Si no le prestas la debida atención al momento de comer, masticas más deprisa y esto repercute en tu digestión, haciéndola más lenta y pesada.
– Pierdes la sensación de saciedad. Al no poner atención mientras comes, porque estás distraído, entonces el cerebro no procesa que ya comiste suficiente y estás lleno, por lo tanto, sigues comiendo y más tarde también lo harás.
¿Qué puedes hacer?
Empieza por dejar de lado la televisión, el celular, la tablet y todo lo que te distraiga del momento de comer y empieza a hacerlo con consciencia.
Come con consciencia. Esto te ayuda a saber cómo y por qué comes de la manera en que lo haces; a disfrutar del momento y, lo mejor, a controlar tu peso.